"Estas nuevas reglas harán que nuestra agua potable sea aún más segura al monitorear contaminantes como los microplásticos, finalmente establecer umbrales para disruptores endocrinos como el bisfenol A e imponer límites más estrictos para el plomo, que son una amenaza real para la salud humana", dijo Christophe Hansen MEP, líder negociador del Parlamento Europeo, antes de la votación.

"No hace falta decir que todos deberían tener acceso a agua limpia y de buena calidad", dijo Hansen, y agregó que para él, algunos aspectos de las nuevas reglas del agua incluso irán más allá de su intención original. "Cuando mejore la confianza en beber agua del grifo, los ciudadanos utilizarán y tirarán menos botellas de agua de plástico, lo que ayudará a proteger el medio ambiente. También pueden ahorrar mucho dinero ya que el agua potable es mucho más barata que el agua embotellada", explicó Hansen.

La ley, que se espera que sea validada hoy por la Comisión de Medio Ambiente, es el resultado de un acuerdo entre el Parlamento Europeo y los Estados miembros de la UE acordado en diciembre pasado. Fue un seguimiento de la primera iniciativa ciudadana europea exitosa llamada Right2Water, que reunió más de 1,8 millones de firmas en apoyo de la mejora del acceso al agua potable para todos los europeos.