HONDURAS | PAIS DE SORDOS - DIRECTORIO NACIONAL PARTIDO DEMOCRATA CRISTIANO
Al concluir el mes de su cumpleaños que, felizmente, coincide con el cumpleaños de la Patria, el PDCH quiere recordar una vez más su recorrido político en un solo ramalazo e insistir por enésima vez en la necesidad de encontrar el camino correcto hacia la construcción de una Sociedad más Justa y más Humana para todos y un Estado de Derecho y de Justicia capaz de garantizar el Bien Común de todos los hondureños.
Aunque no hemos podido avanzar con la velocidad que quisiéramos, el PDCH, en un ambiente adverso y complejo, ha hecho aportes significativos en campos sensitivos como los derechos laborales de los trabajadores, en la organización y desarrollo del movimiento cooperativista, particularmente en el de ahorro y crédito, apoyando claramente los esfuerzos de un sector social de la economía que lucha por sobrevivir en un ambiente de competencia salvaje. Fue un diputado demócrata cristiano quien desde el Congreso Nacional consiguió la aprobación de un decreto que hizo despegar al movimiento ambientalista nacional. La DC ha sido clave para fortalecer y democratizar la participación ciudadana en la vida política del país y ha contribuido a mantener la frágil gobernabilidad y la institucionalidad del Estado. Nos sentimos particularmente orgullosos de nuestra contribución a la construcción de la Ley que contiene la Visión de País y Plan de Nación, una magnífica iniciativa que nos colocó en el punto de partida hacia objetivos nacionales de largo plazo y que el gobierno anterior y el presente se encargaron de desmantelar para volver a la irresponsable costumbre de estar inventando programas para favorecer a sus parciales y amigos y para manosear los escasos recursos del país.
Siempre hemos dicho que aspiramos a la construcción de una Nueva Sociedad distinta al modelo actual que sólo ha producido miseria, injusticia y desesperanza; pero nuestro modelo se fundamenta en la Libertad, la Justicia, la Equidad y la Solidaridad. Necesitamos un modelo económico, político y financiero que respete la libertad individual, colectiva y empresarial que estimule las iniciativas particulares, pero en función del Bien Común de la nación, con un Estado lo suficientemente fuerte para controlar los posibles excesos y abusos, tales como la evasión de impuestos y especialmente los monopolios que dejan en pocas manos los recursos que deben estar al servicio de todos. Un Estado que promueva la Solidaridad “para que todos seamos responsables de todos” y que se ocupe eficazmente y de manera subsidiaria, de auxiliar a los más necesitados, con políticas financieras apropiadas, asistencia técnica y reglas justas del mercado para impulsar la productividad y la producción y romper definitivamente con ese infame círculo de miseria que nos ha dejado el modelo neoliberal.
El PDCH siempre ha estado en contra de las ZEDES, porque hay otras formas para generar empleos decentes sin hipotecar la soberanía nacional; pero este gobierno no puede cerrar los ojos al daño que con esta estrategia el gobierno anterior le causó al pueblo hondureño y pretender ignorar las multimillonarias demandas que se han interpuesto contra el Estado, como resultado de la derogación arrebatada e irreflexiva de la ley que les dio vida. Las consecuencias de esa política del avestruz, serán responsabilidad directa del actual gobierno.
Hacemos un nuevo llamado a las altas esferas del gobierno y toda la clase política para respetar la institucionalidad y el Estado de Derecho y de Justicia. Es inaceptable la suspensión de actividades en el Congreso Nacional. Los diputados están obligados por mandato soberano del pueblo a resolver los grandes problemas nacionales. Es su responsabilidad la inmediata elección de las autoridades superiores del Ministerio Público. Condenamos enérgicamente que, mientras hay tantos asuntos pendientes de debate en el Congreso Nacional, un numeroso grupo de diputados de varios partidos políticos sigan devengando sueldos y se apropien indebidamente de los recursos del pueblo para irse de vacaciones a Rusia en un viaje improductivo.
Honduras necesita urgentemente cambios estructurales, pero no se deben importar irracionalmente modelos ajenos que repetidamente han probado su ineficacia en otros países. Para cambiar la realidad, hay que conocerla y respetar sus reglas. No se cambia una sociedad y un Estado con los caprichos de un grupo. Por tal razón es urgente un Diálogo Nacional con todos los sectores para buscar juntos nuestro propio destino. Lo decimos una vez más y lo seguiremos diciendo hasta que algún día se escuche en este país de sordos.
Tegucigalpa, septiembre de 2023
POR EL PODER POPULAR AL PODER POLITICO