La Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) rechaza la medida, adoptada por la Asamblea Legislativa y ordenada por el presidente Nayib Bukele, por representar una ruptura total del sistema republicano y una flagrante violación a la Constitución y al Estado de Derecho en El Salvador.

La ODCA denuncia el intento del presidente Bukele de concentrar todo el poder en sus manos para comenzar la persecución, anulación y silenciamiento de la oposición democrática en ese país.

La ODCA advierte que estas acciones, al margen de la Constitución y las leyes, constituyen en la práctica un Golpe de Estado, perpetrado por el presidente Nayib Bukele.

Demandamos, al presidente y sus parlamentarios, revertir a la brevedad las arbitrarias e ilegales medidas de destitución y persecución de funcionarios públicos y respetar el principio de separación de poderes. Este es el único camino para restablecer el Estado de Derecho y la institucionalidad democrática quebrantada.

La ODCA advierte también que la concentración de los Poderes del Estado en manos de una sola persona encamina inevitablemente a El Salvador hacia un régimen autoritario, basado en la fuerza, la persecución política y la impunidad. Este nuevo orden político representa también la muerte de la democracia por la que tanto lucharon los salvadoreños.

La imposición de una visión única y la eliminación de los contrapesos de la separación de poderes son los primeros pasos para terminar con una sociedad justa, pluralista y democrática.

La ODCA se une al rechazo de la comunidad internacional a este nuevo atentado a la democracia, las libertades y los derechos de los salvadoreños y reiteramos nuestra decisión de seguir apoyando, junto a los organismos internacionales, el restablecimiento del orden constitucional y democrático.