El presidente del Partido Popular andaluz, Javier Arenas ha instado al Gobierno andaluz a derogar el decreto-ley de reordenación del sector público ante las críticas que ha suscitado entre los funcionaros y ha apostado por emprender otras medidas alternativas, como "auditar todos los servicios públicos" para analizar la relación entre "coste y eficacia" que existe entre los mismos al objeto de beneficiar al ciudadano.
Durante su intervención en el Congreso de Acción Social y Condiciones de Trabajo en las Administraciones Públicas que se celebra en Granada, y en el que ha participado en su condición de ex ministro de trabajo, Javier Arenas ha vuelto a defender la necesidad de una "reforma profunda" de todas las administraciones públicas y ha apostado por alcanzar un "gran pacto de austeridad" en todas ellas: ayuntamientos, corporaciones provinciales, comunidades autónomas y Gobierno central.
El presidente del PP ha asegurado que con un gobierno del PP en Andalucía habría "una reducción espectacular" de altos cargos, pero no sobraría "ni un funcionario", que tendrían "su mejor etapa en la vida autonómica". En este sentido, ha considerado que, con los populares al frente de la Junta de Andalucía, la administración "profesional" tendría "más apoyo y más garantías que nunca" y los funcionarios dejarían de soportar "las injerencias de los políticos en su trabajo".
Arenas también se ha referido a la movilización que tuvo lugar el pasado sábado de funcionarios contra el decreto de reordenación del sector público andaluz, que ha calificado de "histórica", y ha pedido al jefe del Ejecutivo, José Antonio Griñán, que derogue esa norma y se siente a negociar con todos los sindicatos
Respecto al acuerdo alcanzado entre la Junta de Andalucía, CCOO y UGT sobre el decreto-ley de reorganización del sector público, Arenas ha opinado que los sindicatos tienen plena legitimidad para defender los intereses de sus afiliados, aunque se ha mostrado convencido de que "el problema no es sindical" sino político.
Así, ha vuelto a pedir al presidente de la Junta , José Antonio Griñán, que anuncie de "inmediato" la degoración de esta norma y se siente a negociar con "todos los sindicatos de la función pública". "Le pido al señor Griñán que por una vez esté donde tiene que estar" e "inicie una vía de diálogo que solvente este asunto", ha remarcado Arenas.
A su juicio, el problema no es por tanto de tipo sindical, sino que se debe "a la soberbia de la Junta de Andalucía", que después de treinta años de gobierno socialista, ha añadido, "no quiere oír a los ciudadanos ni a los funcionarios".
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