El gobierno debe adoptar una actitud de “tolerancia cero” frente a las campañas de “descrédito internacional” de la República Dominicana realizadas por organizaciones de solidaridad con Haití, opinó este domingo el secretario general del Partido Reformista Social Cristiano.

De conformidad con Ramón Rogelio Genao, las supuestas campañas afectan la imagen del país y lesionan al turismo y al comercio exterior, razones por las cuales es “indispensable” hacerles frente con firmeza.

En ese contexto, y a nombre su partido, Genao saludó la nota diplomática entregada por el embajador dominicano en España, César Medina, al arzobispo de Toledo, Monseñor Braulio Rodríguez Plaza, pidiéndole intervenir para que cese “la campaña” del sacerdote Christopher Harley, un activista de los derechos de los inmigrantes haitianos que residió durante muchos años en los bateyes de San Pedro de Macorís.

El Secretario General del Partido Reformista, Ing. Ramón Rogelio Genao, saludó hoy en nombre de esa organización las protestas llevadas a Toledo por la Cancillería de la República en una Nota Diplomática entregada por el Embajador Dominicano en España César Medina Abreu al arzobispo de esa ciudad Monseñor Braulio Rodríguez Plaza, así como las gestiones iniciadas por la Iglesia Católica Dominicana para poner fin a la campaña del sacerdote Christopher Harley en contra del país en Europa.

“La República Dominicana debe dejar atrás su actitud pasiva ante las recurrentes campañas internacionales en contra del país, iniciar de una vez y por todas una política de tolerancia cero a éste tipo de ataque, que involucre no sólo a autoridades sino también al sector privado y a la sociedad en sentido general”, dijo el dirigente reformisa.

Genao participó esta mañana en la vigilia “Una hora por la Patria”, en la que también tomaron parte la Fuerza Nacional Progresista, y Partido Nacional de Veteranos y Civiles y la Alianza Dominicana por Haití en protesta contra el acuerdo de los partidos Revolucionario Dominicano y de la Liberación Dominicana de modificar en la segunda lectura del proyecto de reforma constitucional el artículo referido a la nacionalidad. También exigieron una política migratoria “más responsable”.