Los partidos de derecha recibieron la semana pasada una presentación de los planes financieros del gobierno de Mauricio Funes. En una primera reacción, el Partido de Conciliación Nacional (PCN) expresó su temor hacia una posible huída de inversionistas.
“La reforma fiscal nos preocupa un poco, no sentimos que promuevan el desarrollo, pensamos que hay que revisarlo de una manera muy responsable para que no vaya a ser motivo de atraso”, afirmó el jefe de fracción del PCN, Roberto Angulo. El dirigente de derecha explica que es necesario estudiar bien la reforma fiscal para evitar “que no le dé seguridad al inversionista o que aleje la inversión”.
Sin referirse a una medida en particular, el líder del PCN instó a estudiar bien los impuestos. “En términos generales, esto es lo que salimos comentando algunos de nosotros después de la presentación, que podía asustar al inversionista nacional y extranjero y que no es eso lo que se pretende”, afirmó.
Sin embargo, este líder político está de acuerdo en que es necesario llevar más fondos a las arcas del Estado procurando evitar la evasión fiscal y el contrabando, controlando el gasto y equiparando impuestos –eliminación exenciones.
La política presupuestaria del Ministerio de Hacienda para 2010 proyecta acuerdos sobre “la distribución de la carga fiscal, la equidad horizontal y vertical, la transparencia y rendición de cuentas” e incluye “revisar los incentivos fiscales”.
La “gallinita”
El Ministerio de Hacienda también invitó al PDC a escuchar la información sobre el presupuesto y la reforma fiscal. El diputado encargado del tema presupuestario en el Partido Demócrata Cristiano (PDC), Francisco Zablah, agradece al gobierno el hecho de compartir previamente los proyectos. “No todo está escrito en roca. Está planteando cuáles son los problemas para ver cómo los partidos ayudamos”, dice.
Pero en la reforma fiscal ve algunas cosas “en las cuales el partido no va a estar de acuerdo”, expresa.
Su tesis es que la empresa privada es “la gallinita de los huevos de oro” y que por ello no se puede cargarla con más impuestos. ¿Por qué? “Están en una crisis y no es la manera de salir”, sostiene.
El pedecista empieza a señalar otros factores que influyen en la crisis. “Las empresas en Estados Unidos están saliendo de la crisis bajando los intereses de los bancos y aquí están subiendo”, observa.
Se regirá bajo los siguientes lineamientos:
- Garantizar recursos para necesidades sociales: priorizar recursos a educación, salud y nutrición, empleos, seguridad ciudadana.
- Propiciar consensos para una reforma fiscal integral en donde haya “equidad horizontal y vertical” y transparencia, y promover estudios para mejorar recaudación.
Elevar el coeficiente de recaudación tributaria respecto al PIB, reformando la ley para combatir la evasión y estimulando la responsabilidad social de la empresa privada. Esto también incluye “revisar los incentivos fiscales” y racionalizar subsidios; así como cruce de base de datos y equipamiento a aduanas.
- Plan fiscal para enfrentar la crisis: se pretende incrementar ingresos y la demanda agregada nacional (Plan anticrisis), para disponer de “reservas estratégicas” y medidas de “estímulo fiscal” para enfrentar crisis.
- Reformas tributarias: eficiencia en la recaudación y fiscalización (sanciones).
- Administración honesta del gasto público: elevar el gasto en seguridad ciudadana, suprimir el gasto superfluo.
- Descentralización participativa del gasto público: responsabilidades a alcaldías.
- Endeudamiento para el desarrollo: promover una ley marco que garantice que todo nuevo endeudamiento corresponderá a prioridades nacionales.
- Instrumentos para mejorar el manejo del presupuesto: buscan medir la eficiencia del gasto público por resultados.
- Política de inversión pública para el desarrollo. Incluye alianzas público-privadas “que no comprometan la soberanía, asegurando el control del Estado sobre nuestros recursos naturales”.
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