El ex gobernador del Estado Falcón y presidente de la Comisión Electoral de Copei, José Curiel solicitó la destitución del presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA) Rafael Ramírez, por la explosión en la refinería de Amuay. “Pedimos que se haga una investigación para que la próxima administración pueda hacer los correctivos necesario”, aseguró.
Por su parte, Gustavo Gabaldón, miembro de la Dirección Nacional del partido y ex director de PDVSA, afirmó que la empresa venezolana debe seguir siendo la “empresa insignia de Venezuela”, mantener su imagen de tradición “que está resquebrajada” y cambiar las pautas de gerencia en la organización.
“Es una tarea impostergable el reto que significa para un nuevo gobierno el rescate de PDVSA, su reestructuración, el regreso a una gerencia de resultados, donde la productividad y eficiencia sean la regla. No queremos una PDVSA con corrupción ni mucho menos que exista politización en sus decisiones”, manifestó el ex director de la empresa estatal.
Asimismo, lamentó el accidente ocurrido en Amuay y envió las condolencias, en nombre de la familia copeyana, a los familiares de las víctimas y a los habitantes de Falcón.
También declaró que la empresa petrolera debe dedicarse exclusivamente a explorar, producir, transportar, almacenar, refinar y vender petróleo y sus derivados; “a PDVSA se le pone a distribuir alimentos y a encargase de varias actividades sociales y no está preparada para eso”. “Proponemos la creación de un ministerio que se encargue de la parte social, para que sea bien administrada ésta importante área”.
Finalmente, el dirigente de la tolda verde catalogó el accidente “de extrema magnitud, sin precedentes en la historia petrolera de Venezuela” y advirtió al país sobre el deterioro de las instalaciones e infraestructura de la empresa.
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