Encabeza la lista del Partido Conservador a la Cámara por Bogotá. Es un duro crítico de Uribe y de su propio partido.

Lo consideran el niño terrible del conservatismo, y parece más de la oposición. ¿Cómo se lo aguantan?

A mí no es que me aguanten, sino que yo aguanto al Partido Conservador porque me gusta ver a mi partido con credibilidad entre las mujeres, los jóvenes, los campesinos... Que vean que en lo que los representamos hacemos honor a los principios y a las necesidades que tiene la sociedad colombiana.

Pero lo llaman la piedra en el zapato del conservatismo ¿No debería estar en la oposición?

Esa no es la percepción que yo le logro generar a la gente. Usted me elige y usted sabe perfectamente que yo soy un tipo incondicional.

¿Y hay uribistas incondicionales?

En el Congreso, ¿cuándo los ve dando un debate?, ni siquiera son capaces de ir. O cuando van es porque el Gobierno los chantajea: si usted no viene a votar, le quitamos el Bienestar Familiar o no le vamos a dar esos contratos. Pero eso no pasa conmigo, yo estoy haciendo el quórum. 

¿Noemí Sanín, Andrés Arias o Andrés Pastrana?

Estoy primero con Pastrana, porque nunca he sido ni converso ni desleal. En el tema de campaña estoy con Noemí Sanín.