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HONDURAS. "Estamos construyendo un poder político diferente": Felícito Ávila

Editor Noticiero DC |

Con la convicción de que este proceso electoral marcará la historia política de Honduras, Felícito Ávila, candidato a la Presidencia por el Partido Demócrata Cristiano, expuso abiertamente su opinión sobre la situación del país y dio a conocer que su plan de gobierno estará basado en la aplicación de la ley.

En el conversatorio en Diario La Prensa, el presidenciable dijo: “El retorno de Mel Zelaya es reconocer que la Constitución se equivocó y esto es sumamente delicado”.

Cree que después del 28 de junio los partidos pequeños han tenido mejores oportunidades en los medios de comunicación, lo cual considera determinante para el proceso electoral.

¿Cómo ve los avances de la campaña política?

A nivel de las candidaturas presidencial, municipales y departamentales, se ha avanzado positivamente a pesar de las circunstancias porque ésta ha sido una campaña con muchas distracciones políticas. Después del 28 de junio no se ha considerado hacer campañas de provocación, sino de unidad.

Hemos tenido un gran apoyo de los medios de comunicación porque nos han permitido dar a conocer lo que pensamos.

Antes no teníamos estas posibilidades. Esto ha sido determinante en las campañas porque ha habido orientación y no sólo el simple hecho de dar un discurso en una plaza. Nuestro partido no ha tenido las condiciones económicas de los demás para competir.

¿Esto es efecto de la crisis?

Sí, porque ha evitado concentraciones acostumbradas por los tradicionales y ha dado mayor equidad en la distribución de tiempo y la presencia de los candidatos. Eso nadie lo puede desconocer y que alguien no lo aprovechara ni participara es muy aparte.

Los resultados se verán traducidos en la calidad del elector, que no sólo vaya a votar, sino a elegir.

¿Cree que tendrá un repunte en las elecciones?

Hemos tenido la oportunidad de decir insistentemente lo que queremos. La gente nos escucha más, puede reflexionar y saber que hay un nuevo elemento en el proceso electoral.

¿La posición que usted ha asumido después del 28 le ha dado nuevas oportunidades?

Sí. Es una oportunidad para que los demás reflexionen sobre qué es una campaña. Seguimos insistiendo en que las campañas tienen que estar rodeadas de la verdad. Pero hay anarquía por falta de atención oportuna para resolver los problemas de la población.

De lo que más ha adolecido el país es de falta de toma de decisiones. Nadie ha puesto las cosas en su lugar. Nadie se anarquiza si hay solución de los problemas.

Usted habla de su posición sobre lo que pasó el 28 de junio. ¿Le ha extrañado que otros candidatos presidenciales no lo hagan?

Ellos están calculando y otros no tenemos nada que calcular.

O tengo compromiso por el país y voy a ponerle la cara y el pecho al problema o estoy calculando mi compromiso para no sentirme dañado. Debemos dejar clara nuestra posición y como partido estamos inmersos en la batalla por defender la democracia del país.

El ex secretario de la OEA, César Gaviria, dice que es imposible la restitución de Zelaya. ¿Usted comparte ese criterio?

Estoy convencido de que lo que ocurrió el 28 de junio, cuando se hizo la sucesión legal, fue que se aplicó lo que establece la Constitución de la República.

Por tanto, si creo esto, no me interesa quién la aplicó, sino que la aplicación generó la sustitución en un mandato que puso nuevas condiciones y realidades en el país. Por eso creo que el retorno de Mel Zelaya es reconocer que la Constitución se equivocó y esto es sumamente delicado. No lo admito. Sigo creyendo que la medida de la sustitución fue la correcta. Era el momento y creo más bien que fue tardía. Estoy condenando que las negociaciones políticas nos han conducido a este tipo de situaciones, las cuales con una negociación se resuelven.

La impunidad hay que combatirla y eso significa la aplicación de la ley y lo que ocurrió el 28 de junio es no permitir más la impunidad; por eso el retorno de Mel al poder no debe estar condicionado a una negociación, sino a la aplicación de la ley.

¿Qué siente cuando escucha a presidentes como el de Venezuela, Hugo Chávez, y el de Nicaragua, Daniel Ortega, hablando sobre condenar a Honduras por lo que pasó el 28 de junio?

Nos da coraje y es la sustentación de lo que hemos venido viendo, y es que el modelo que se ha tratado de implantar en Honduras no corresponde al fortalecimiento del Estado de derecho. Nuestra lucha es por las elecciones para que el proceso camine.

¿Cómo analiza a Chávez?

Es un personaje con pensamiento socialista en el marco de una administración política con capacidad económica para ser dominante.

Condiciona a la gente en su proyecto por su condición económica con el petróleo, los préstamos y otros elementos.

Quiere cambiar la realidad de un modelo a otro modelo con el dinero, frustrando y dominando. Si Honduras sale de este contratiempo, será un espejo internacional para decir que no es tan fácil lo que quieren hacer.

¿Cree que ya estamos a salvo del socialismo?

No; los proyectos políticos no mueren con una persona. Éstos se van desarrollando no solamente con un comandante; pueden tener varios nuevos que lo asumirían. Hay que combatirlo quitándole todas las herramientas que han utilizado y éstas las han basado señalando el grado de injusticia que tenemos en el país. Esto nos conduce a ser realistas sobre las necesidades del pueblo.

Ellos les están ofreciendo soluciones inmediatas, conduciéndolos a una acción política extremista.

¿América Latina se volvió socialista o los populistas han engañado a la gente?

América Latina está pasando por un momento del debate político de un proyecto que ha sido impulsado por agentes.

Aquellos que consideraban que con la caída del muro de Berlín habían desaparecido las ideologías estaban equivocados.

Porque se haya mantenido el sistema capitalista y los socialistas se hayan refugiado tampoco ha desaparecido el proyecto marxista en América Latina.

Por eso no esperemos que el 29 de noviembre se hayan resuelto todos los problemas políticos.

¿Su pensamiento ha variado con el paso de los años o se ha mantenido?

No he variado. Soy un hombre formado desde 1973 en el pensamiento y la doctrina social de la Iglesia, en la doctrina del movimiento social cristiano de los trabajadores y en la doctrina demócrata cristiana del partido. Mi razón de lucha siempre ha estado fundamentada y no cambiar de un extremo a otro es muy importante.

¿Qué le parece el rol de las organizaciones?

En este caso, creo que Mel con su estrategia trató de acercar a los sectores sociales. El problema es que les causó daño.

Nuestra gente siempre ha creído que los cambios se hacen cuando se tiene el poder y él ofreció eso. Cambios que se venían gritando en las calle y los políticos de turno nunca le pusieron atención a esas necesidades con las cuales Mel despertó a la gente. Lamentablemente los condujo a un lugar improcedente que es su propio proyecto.

Por eso nunca he culpado a las organizaciones ni a sus dirigentes porque tuvieron la oportunidad que les ofrecieron y a muchos les dieron soluciones. Con otros líderes no encontraron esas soluciones y con él sí, no tuvieron más que apoyarlo.

¿Los dirigentes de estas organizaciones lo han criticado por su posición?

No cambio mis posiciones por el qué dirán. Tengo compañeros y buenos amigos que creen que me ubiqué en el lado equivocado. No les digo nada del lado en que están.

Hay quienes siguen resintiendo que si me hubiera incorporado como el hombre que tuvo una historia en las organizaciones, hubiese sido un realce de sus posiciones.

¿Usted tiene el apoyo de la gente de las organizaciones?

No espero tener el apoyo de las estructuras de los trabajadores. Estoy contando con el apoyo de mis amigos dentro de las organizaciones que reconocen que estamos construyendo un poder político diferente a los otros.

Según el Tribunal Supremo Electoral, 3.7 millones de hondureños van a votar el 29. De esa cantidad de gente, ¿en qué porcentaje cree que el Partido Demócrata Cristiano va a ganar con respecto a otras elecciones?

Esa cifra se obtiene sacando de las estadísticas a los compañeros que están fuera del país, que son un millón.

Primero creo que estamos trabajando porque sea un proceso electoral masivo, promover al pueblo para que vaya a las urnas, demostrar nuestros valores de candidatos a diputados y alcaldes y en el campo presidencial y lograr con esa motivación que la gente se sienta satisfecha.

Esperamos que vayan a elegir de manera independiente a su candidato y demostrarle al mundo que hemos defendido el proceso de democracia y alguien lo va a reconocer.
El partido superará las metas que hemos tenido y van a quedar atrás los productos de elecciones anteriores.

La gente se ha quitado la venda, ¿lo han hecho los políticos?

Están obligados a cambiar radicalmente. Ya no pueden seguir las campañas políticas como se hicieron anteriormente, con los costos financieros que se han hecho, porque nadie justifica cuánto se gasta en una campaña electoral interna y general.

Se debe ver si realmente es una inversión o un gasto. Si se trata de inversión, preguntémonos de dónde la van a sacar y cuál va ser el retorno que van a tener. Si es un gasto, hay que preguntarnos cuáles son los ingresos para que podamos creer.

Me parece que debe haber un cambio no sólo en el mensaje, sino en el testimonio.

El país está viviendo situaciones críticas para hacer campañas costosas e incoherentes. Qué le van a dar al país el 27 de enero si no son capaces de tener una campaña coherente con la realidad del país.

Perfil

Nombre: Felícito Ávila Ordóñez

Nacimiento: 21 de febrero de 1949; originario de Nacaome, Valle

Estado civil: casado con Gloria Olinda Reyes

Hijos: cinco

Cargos: miembro del directorio municipal de Choluteca, candidato designado a la Presidencia, secretario de finanzas de la CGT, secretario general adjunto de la Central Latinoamericana de Trabajadores, miembro del comité de la Conferencia Mundial de Trabajadores, vicepresidente del Seguro Social